¿Cómo eliges a tus relaciones de pareja? ¿Eres capaz de ver más allá de lo evidente al conocer a una persona? ¿Por qué algunas personas son capaces de crear arte con muy poca formación? Todas estas respuestas se encuentran en la intuición; o en la falta de ella. Hay quien se considera muy intuitivo, cuando en realidad esta siendo condicionado por sus sensaciones, y a su vez, dominado por su inconsciente. Algunas personas ponen énfasis en las descripciones de experiencias místicas y mitológicas con entusiasmo, mientras que otras las desprecian con un sin sentido científico. Para comprender un poco más nuestro consciente e inconsciente profundizaremos en los tipos psicológicos descritos por el psicólogo Carl Jung.
Jung describió los tipos como actitudes generales. Para identificar el tipo psicológico es necesario determinar si la persona está orientada al mundo interior (introversión), o hacia la realidad externa (extroversión). Jung llamó a la introversión y a la extroversión como la actitud fundamental del individuo. Posteriormente determino cuatro funciones psicológicas: pensamiento, sentimiento, sensación e intuición. Sobre estas cuatro funciones las personas utilizan una función dominante, que será introvertida o extrovertida; y se verá reforzada por otra que será una función auxiliar, y es de carácter opuesto a la dominante. Por ejemplo, una persona puede utilizar el pensamiento introvertido como función dominante y la intuición extrovertida cómo función auxiliar.
El pensamiento y el sentimiento son funciones racionales y opuestas; la sensación y la intuición son funciones irracionales y antagónicas. Aquellas personas que su función principal sea el pensamiento, su inconsciente estará determinado por el sentimiento.
4 Funciones psicológicas
Las cuatro funciones psicológicas describen los procesos cognoscitivos fundamentales que todo el mundo emplea ¿Cómo tomamos decisiones? ¿Cómo obtenemos información sobre la cual basamos nuestras decisiones? las respuestas a estas preguntas se encuentran en estas cuatro funciones.
Pensamiento: La función psicológica que pone conexión de acuerdo con sus propias leyes y contenidos de representación ya dados, el individuo ejecuta su tarea vital bajo la guía de una reflexión intelectual. Cabe distinguir un pensar activo y un pasivo. El pensar activo es acto de la voluntad; el pensar pasivo es algo que simplemente ocurre. El pensar dirigido es parte del pensamiento; y la intuición es el pensamiento pasivo o no dirigido.
Intuición: Es la función psicológica que transmite percepciones por vía inconsciente. Todo contenido puede ser objeto de esa forma de percepción, tanto objetos externos como internos. No es ni una sensación sensorial, ni un sentimiento, ni una inferencia lógica. Un contenido cualquiera se presenta como un todo acabado, sin que seamos capaces de averiguar cómo ha llegado a construirse. Es una función perceptiva irracional, transmitida por el inconsciente.
Sentimiento: Es un proceso que acontece entre el yo y un contenido dado, otorga al contenido un determinado valor en el sentido de aceptación o rechazo. Es un proceso enteramente subjetivo y que puede ser independiente del estimulo externo, aunque se asocie a toda sensación. Las valoración realizada por el sentir se extiende a todo contenido de la consciencia.
Sensación: Aquella función que transmite un estímulo físico a la percepción, la sensación es ante todo “sensorial”: la percepción mediante los órganos de los sentidos y del sentido corporal. Es por un lado un elemento del representar, por cuanto transmite al representar la imagen perceptiva del objeto externo, y por otro, un elemento del sentimiento, mediante la percepción de las alteraciones corporales, otorga al sentimiento el carácter afectivo.
8 tipos psicológicos
La orientación extrovertida o introvertida de las 4 funciones psicológicas básicas da lugar a los 8 tipos psicológicos fundamentales.
Pensamiento introvertido: consiste en la formulación interna de preguntas, las personas caracterizadas por este tipo tratan de comprenderse a si mismas, formulan sus teorías personales y priorizan el factor subjetivo. Interesados en las ideas, en lugar de en los hechos, dan un gran valor a la realidad interior y poco al exterior o a los datos objetivos. aspiran a la profundización y no a la amplificación.
Pensamiento extrovertido: Se rigen a si mismos según reglas y principios fíjos, requieren de datos objetivos para formular su pensamiento. Este individuo pondrá toda su exteriorización vital bajo la dependencia de conclusiones intelectuales, las cuales dicta según datos objetivos: con esta fórmula se mide el bien y el mal, define lo bello y lo feo; es correcto todo lo que corresponde a este orden, incorrecto lo que la contradice y es casual lo que transcurre a su lado con indiferencia.
Sentimiento introvertido: es una función enjuiciadora que busca la armonía con sus creencias y valores; los cuales son únicos y no se basan en valores externos. Son individuos callados, inaccesibles, difíciles de comprender y melancólicos, a menudo ocultos tras una máscara infantil o banal.
Sentimiento extrovertido: Los individuos caracterizados por esta función se guían por el sentimiento provocado por lo externo, su actividad intelectual y relacional se restringe a lo que siente; puede pensar muy bien pero toda conclusión es rechazada, por muy lógica que sea, si puede concluir en el trastorne del sentimiento. El sentimiento extrovertido busca el mayor bien para todo el mundo, por eso cree en la existencia de leyes y valores objetivos, los cuales va formando por medio de la información que recibe por los sentidos. Según Jung, el sentir es indiscutiblemente una peculiaridad más visible en la psicología femenina.
Sensación introvertida: la sensación tiene un factor subjetivo, junto al objeto percibido sensorialmente está un sujeto que tiene la sensación y que aporta al estímulo objetivo su disposición subjetiva: esa sensación se basa en el componente subjetivo de la percepción. Si por ejemplo, varios pintores pintan un mismo cuadro, esforzándose al máximo en representarlo con fidelidad, cada pintura será distinta; y esto se debe no solo a una capacidad mas o menos desarrollada, sino a la consecuencia de un ver distinto: es ahí donde la sensación introvertida manifestará una pronunciada diversidad psíquica en la atmósfera y en el movimiento del color y las figuras. Esta es una función característica de muchos artistas.
Sensación extrovertida: Su sentido objetivo de los hechos está extraordinariamente desarrollado, lo que percibe sensorialmente le sirve de guía para nuevas sensaciones. Para él, la sensación es la exteriorización concreta de vida; significa una plenitud de vida real. Considerará racional todo aquello que lleve a la pura facticidad, pero no son nada racionales.
Intuición introvertida: función asociada a soñadores, fanáticos y artistas, son fundamentalmente subjetivos e inestables en las relaciones personales. Se dirige a objetos internos del inconsciente, que no poseen una realidad física, sino psíquica. Los objetos internos aparecen como imágenes subjetivas que no se encuentran en su experiencia externa. No se demora en las posibilidades externas, sino que se focaliza en aquello que ha sido desencadenado por lo externo. Las imágenes internas le fascinan y se demora en ellas y sus modificaciones. Esta es otra de las funciones asociadas a las capacidades artísticas.
Intuición extrovertida: Genera una amplia gama de posibilidades en el mundo objetivo. Es un proceso inconsciente, activo, creativo que introduce el objeto externo, conformándolo, tantas cosas como saca de el, así crea un efecto inconsciente en el objeto. En un primer momento la intuición transmite imágenes o relaciones que no pueden ser alcanzadas por otras funciones, esas imágenes tienen valor de conocimientos precisos que ejercen una influencia determinante sobre el obrar.
En los próximos artículos profundizaré mas sobre estas funciones, su relación con la música y los procesos inconscientes que subyacen en ellas, especialmente de la intuición.
